viernes, 27 de octubre de 2017

Ser

Extraño levantar las manos
y hallar la luna
pendiendo del cielo,
pero tan cerca de tus dedos.

Grande, misterioso,
mirar los ojos de tus hijos
y abismarte en el alma
que los habita en lo profundo.

 Dulce, en noche de verano,
sentir en los pies,
sentado junto al mar,
el grato frescor del agua.

Grandioso notar en tu cabeza
cómo se aquieta el mundo
al respirar, hondo en tu pulmón,
el pulso de lo que existe.

Fascinante saber que acabarás,
que vas a tener un día fin,
pero que el instante de hoy
es sin medida, eternamente tuyo.

Nicolás Calvo
Madrid
Octubre 2017

lunes, 23 de octubre de 2017

Sinsentido

Es indiscutible.
No estoy en mi mejor momento.

Apenas escribo dos líneas,
las siguientes se me escapan.

Está claro que hay días
de una sola línea.

Aunque ésta
acabe en el Infinito.

Nicolás Calvo
Madrid
Octubre 2017

viernes, 20 de octubre de 2017

Ajedrez

Falsa defensa de perro:
gambito terrible,
arcano lenguaje
del milenario juego.

Por medio
del movimiento secreto
de sólo dos piezas
el Eterno Jugador,
que en nada yerra,
asfixia al contrario;
rival inane entre sus manos
que, aterrado, abate el rey
sin resistencia.

Nada resta. No hay revancha.
Como el can de su nombre
el vencido esconde la cabeza
entre los miembros
y expone la nuca.

Un golpe basta y el fin llega

Oculto entre los nombres
está el propio.

Cuando el Hacedor
te siente ante el tablero,
recuerda que el final
siempre está escrito
y sólo a tu alcance queda
hacer brillante la partida,
porque siquiera un Dios,
Hijo del Padre,
pudo escapar al Sacrificio.

Nicolás Calvo
Madrid
Octubre 2017

miércoles, 18 de octubre de 2017

De buena mañana

Oigo un violín
(suena)
como un gato,
concierto desafinado
en la madrugada.

Quiero dormir
y me despierto.
La gracia está en el violín
(él duerme como un gato)
Amanecer de papel
sobre la almohada.
El alba suena a violín
(¿o es el gato?)

Nicolas Calvo
Madrid
Octubre 2017

jueves, 5 de octubre de 2017

Sirinoque

La mano, en un gozo,
exalta el compás.
Los pies se arrastran suaves
y apenas taconean.

El tambor suena templado
y sobre el suelo se apuntan,
en un mudo duelo, los tobillos.

Hombre, mujeres, danzan.

Es una gentil apología del amor.
Es la paz viniendo de abajo arriba.
Es el dolor que se comba y se retira.

Algo tan simple como
encontrarse en un roce
humedece los ojos, los labios
y el corazón se agita.
La música suena
en un temblor tal que de rama.

Hombres, mujeres, danzan.

Sobre la tierra nada mas se alza
el remolino del polvo
que levantó la alegría.

Nicolás Calvo
Madrid
Octubre 2017


miércoles, 4 de octubre de 2017

Metáfora del superviviente

No me gusta vivir de las palomas
de su carne grisácea y resobada
de sus plumas marrones y grasientas
de sus picos que dan olor a cosa muerta.

No me gusta vivir de las palomas
porque de ellas salen huevos hueros
porque sus picos pican verde cieno
y sus ojos, como cuentas despintadas,
sólo miran hacia atrás con extravío.

No me gusta vivir de las palomas
porque yo sé que no son aves:
son los fútiles sentimientos que expelen
los errados cerebros de los locos
que derraman su humor en las aceras.

Las palomas me dan frío, me repelen.

Por eso no me gusta vivir de las palomas.

De miedo y dolor viven sus cuerpos
de trigo azul y de luz negra, su alma,
desgajada por fin del cuello roto,
del pecho añil de un hombre exhausto
con los ojos vidriados de mirar sólo hacia dentro.

Nicolás Calvo
Madrid
Septiembre 2017

martes, 3 de octubre de 2017

Just talking

Ella – ¿hay un fallo?
él    – sí
Ella – ¿no me quieres?
él    – ¿qué me preguntas?
Ella – que si me quieres
él    – no
Ella – entonces no hay ningún fallo

Nicolás Calvo
Madrid
Septiembre 2017

De l'eau

El agua es el agua
y se  mira a si misma
en su transparencia…

Pero no se ve

Esa es la profunda pena del agua

Nicolás Calvo
Madrid
Septiembre 2017
 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.