Caminé durante un año
y no encontré
un hombre más inteligente
que yo.
Caminé durante dos años
y no hallé
a nadie tan hermoso
como yo.
Caminé durante tres años
y todo con lo que me comparé
era inferior a mi.
Ahora miro hacia atrás
y veo mis huellas en círculo.
Ni caminando cien años
encontraría
alguien más estúpido
que yo.
Nicolás Calvo
Madrid
Enero 2011
Entre las hayas celestiales: tres poemas de Alba Seoane
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SEDIMENTO
El amor de las rocas está escrito
circula como los efluvios
por su piel áspera
lo escuchan al atardecer
perros famélicos
lectores de huesos y...
Hace 4 días
Y tú eres dichoso, pues eres sabedor de tu estupidez... los hay que ni viviendo en su ignorancia mil años, serían capaces de reconocer su debilidad.
ResponderEliminarHago, una vez más, mías tus palabras:
"(...) Ni caminando cien años
encontraría
alguien más estúpido
que yo."
Precioso poema que encierra una gran verdad: la naturaleza intrínseca de la estupidez humana...
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