Nadie puede ver la barca
que yo veo.
No está en el mar.
Yace varada
en un campo verde,
en medio de un corro
de amapolas.
Y las amapolas lloran
bajo un cielo
que no puede llover.
Nicolás Calvo
Madrid
Noviembre 2010
Pestañas largas, puñales cortos
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Ilustración creada por IA
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Hace 6 días